El cuento de la lechera

De vez en cuando nos llega el planteamiento de algún proyecto o idea que promete el éxito. En estos casos, por muy razonables y sensatos que parezcan los planteamientos es recomendable hacer de abogado del diablo, e indagar en los problemas que se puedan presentar. Principalmente para saber si se conocen estos problemas y qué importancia se le concede a cada uno. Se puede preguntar por ellos o plantearlos y aguardar la valoración de cada uno.

Si no se reconocen o no se los valora adecuadamente, ese proyecto o idea es un firme candidato al premio 'Cuento de la Lechera'. Lo cual no quiere decir que no vaya a alcanzar sus objetivos, pero para empezar crea un montón de dudas sobre la capacidad para hacer frente a los problemas que aparezcan.

Lo anterior se aplica a muchas cosas, a estrategias empresariales, a proyectos software, ..., a la propia vida. Pero por quedarme en mi terreno profesional, el del desarrollo de software. En alguna parte leí que si al iniciar un proyecto no ves ningún riesgo, lo mejor es no hacerlo. Hay un libro muy bueno sobre gestión de riesgos: Waltzing With Bears, de Tim DeMarco y Timothy Lister. Como dicen en el propio libro: "Los problemas de hoy son los riesgos de ayer".

En el terreno de la empresa también hay grandes equivocaciones. Estratega cita un par de listas sobre ideas y '.com' fallidas. Estas recopilaciones son útiles, porque se aprende mucho más de los errores que de los aciertos, y si son los errores de otros mejor :-). Todos, tarde o temprano, y seguramente en más de una ocasión, no hemos visto en un marrón. A nadie le gustan, pero de los marrones, o mejor dicho, de sus antecedentes, se aprenden muchas cosas. Y el que no las aprende, ya sea un individuo o una organización, lo lleva crudo.